Plantas que las cabras no comen: una guía útil.
Las cabras son animales conocidos por su apetito voraz y su capacidad para comer prácticamente cualquier cosa que encuentren a su paso. Sin embargo, aunque parezca difícil de creer, hay algunas plantas que las cabras no comen. En esta guía útil, te presentaremos algunas de estas plantas, para que puedas tenerlas en tu jardín o en el campo sin preocuparte de que sean devoradas por estos animales.
1. Lavanda: Esta hermosa planta aromática es una excelente opción para tener en tu jardín si tienes cabras. A pesar de su agradable aroma, las cabras no sienten atracción por ella y la dejan completamente intacta.
2. Romero: Al igual que la lavanda, el romero es otra planta que las cabras no comen. Su fuerte aroma y su sabor amargo hacen que las cabras la eviten por completo.
3. Geranio: Los geranios son plantas muy comunes en jardines y macetas, y afortunadamente, las cabras no sienten interés en ellos. Sus hojas y flores son resistentes al apetito de estos animales.
4. Caléndula: Esta planta ornamental de flores amarillas y anaranjadas es una excelente opción si quieres evitar que las cabras se acerquen a tu jardín. Las cabras no suelen comerla debido a su sabor amargo.
5. Romero rastrero: A diferencia del romero común, el romero rastrero es una planta que crece a ras del suelo y es resistente al pastoreo de las cabras. Puedes tenerlo en tu jardín sin preocuparte de que sea devorado por estos animales.
6. Hortensias: Aunque las hortensias son tóxicas para muchos animales, las cabras parecen ser inmunes a sus efectos. Estas plantas son ideales para tener en tu jardín sin preocuparte de que sean consumidas por las cabras.
7. Hierbabuena: Esta planta de sabor refrescante y aroma intenso es otra opción segura si tienes cabras. A pesar de su atractivo olor, las cabras no sienten interés en ella y la dejan crecer sin problemas.
Es importante tener en cuenta que, aunque estas plantas son resistentes al apetito de las cabras, es posible que en situaciones de escasez de alimento o si las cabras están muy hambrientas, puedan llegar a comerlas. Por lo tanto, es recomendable tener un adecuado suministro de alimento para las cabras y supervisar su alimentación para evitar cualquier problema.
Plantas no comestibles para las cabras
Las cabras son animales voraces y curiosos que tienden a comer casi cualquier cosa que encuentren a su paso. Sin embargo, hay algunas plantas que son tóxicas o simplemente no son adecuadas para su consumo. Es importante tener conocimiento de estas plantas para evitar cualquier complicación en la salud de nuestras cabras.
Una de las plantas más comunes que debemos evitar que nuestras cabras consuman es el acebo. Esta planta contiene sustancias tóxicas que pueden causar problemas digestivos y, en casos graves, incluso la muerte. Por lo tanto, es esencial mantener a nuestras cabras alejadas de cualquier acebo que pueda crecer en su entorno.
Otra planta que debemos tener en cuenta es la adelfa. Aunque es una planta muy bonita y decorativa, todas sus partes son altamente tóxicas para las cabras. Ingerir esta planta puede causarles diarrea, vómitos, debilidad e incluso convulsiones. Por lo tanto, es fundamental evitar que nuestras cabras se acerquen a la adelfa.
El tejo es otra planta que debemos evitar que nuestras cabras consuman. Esta planta contiene toxinas que pueden afectar el sistema nervioso de las cabras, causando problemas de coordinación, debilidad muscular e incluso la muerte. Por lo tanto, es necesario asegurarse de que no haya tejos en el entorno donde nuestras cabras pastan.
Otra planta que debemos mencionar es la hiedra venenosa. Aunque las cabras no suelen ser muy propensas a consumir esta planta, es importante tenerla en cuenta ya que puede causarles irritación en la piel e incluso problemas respiratorios si se ingiere en grandes cantidades. Por lo tanto, es mejor mantener a nuestras cabras alejadas de la hiedra venenosa.
Finalmente, debemos tener precaución con las plantas de la familia de las solanáceas, como las patatas crudas o los tomates verdes. Estas plantas contienen sustancias tóxicas que pueden afectar la salud de las cabras si se consumen en grandes cantidades. Por lo tanto, es mejor limitar el acceso de nuestras cabras a estas plantas o asegurarnos de que solo consuman cantidades moderadas.
Protegiendo árboles de ovejas
Los árboles son seres vivos que brindan múltiples beneficios a nuestro entorno, como la generación de oxígeno, la regulación del clima, la conservación del suelo y la provisión de hábitats para diversas especies. Sin embargo, en ocasiones, pueden enfrentarse a amenazas que comprometen su salud y supervivencia. Uno de estos desafíos es la presencia de ovejas que pueden dañarlos al alimentarse de su corteza o ramas tiernas.
Para proteger los árboles de las ovejas y evitar que se conviertan en su fuente de alimento, es necesario implementar algunas estrategias eficaces. Una opción es la instalación de una cerca alrededor de los árboles, utilizando materiales resistentes y duraderos. Esta barrera física impedirá el acceso de las ovejas y las alejará de los árboles, evitando así su daño.
Otra alternativa es la utilización de repelentes naturales que desalienten a las ovejas a acercarse a los árboles. Algunas plantas, como el ajenjo o la vara de oro, poseen propiedades olfativas desagradables para estos animales, por lo que su ubicación cercana a los árboles puede actuar como un disuasivo efectivo. Asimismo, se pueden utilizar productos como el aceite de neem o el vinagre, que al ser aplicados en los troncos y ramas de los árboles, generan un olor desagradable para las ovejas y las mantienen alejadas.
Además de estos métodos, es fundamental promover la educación y conciencia sobre la importancia de respetar y cuidar los árboles en el entorno donde las ovejas pastan. Esto implica enseñar a los dueños de los rebaños sobre los daños que estos animales pueden ocasionar a los árboles y la importancia de preservarlos. Asimismo, es necesario fomentar prácticas de pastoreo responsable, que incluyan la rotación de los animales en diferentes áreas, para evitar la concentración excesiva en un solo lugar y minimizar el impacto en los árboles.
¡Hasta luego! Esperamos que te haya resultado útil.
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